Que tendrá ese Fantino…

Muchos años me he pasado viendo a Fantino en TYC en sus programas de medianoche. Mar de fondo me ha robado muchas horas de sueño, recompensada por muchas charlas divertidas junto a Recondo y con invitados que se unían a su estilo informal de ver el futbol. En la radio, 790, siempre disfrute escucharlo relatar acompañando a Leto y utilizando frases y apodos creadas por el. Cuando pasó a relatar en la TV no pude sentir el mismo cariño, pero en gran parte porque su acompañante era el somnífero e insoportable Gustavo López. Hoy Fantino cambió, se adapto, evolucionó y volvió con todo.
Para este torneo, dirige una de las mesas más polémicas de los últimos tiempos. Durante la semana persigue chismes, y títulos de revista. Los domingos se disfraza de cazador de responsables y tira bombas en el ambiente del futbol. Acompañado por Ruggeri, el flamante periodista Toti Pasman (la tenes adentro!), el Chino Tapia, Alonso, y el paupérrimo periodista Elio Rossi entre otros, se pasan las dos horas del programa gritándose unos a otros por cada pequeña diferencia que tienen. De futbol hablan poco, muy poco análisis de la jugada y hasta tal vez no llegues a ver todos los goles ni escuchar nombrar a mas de la mitad de los equipos.
Convertido en un Jorge Rial del futbol, a Fantino no le interesa mucho el sustento. Quiere noticias, quiere títulos y quiere la primicia. Si algo anda mal, el que este en la mesa que de el nombre del responsable, que se la juegue. Invita personas que estén dispuestas a usar su dedo acusador, como el ex presidente de San Lorenzo atacando al actual. Pasman siempre lleva su carpetita con datos acordes al tema. Ruggeri ataca a Grondona y defiende a Maradona. Todos juegan con sus telefonitos y hacen alarde de sus contactos y los mensajitos o llamados que les llegan. Casi siempre, sin dar nombres. Todos se pelean con Pasman. Rossi baja el ritmo de la mesa hablando muy lentamente y generalmente pelotudeces. Alonso pone caras e insulta a la dirigencia de River cuando Fantino le da la oportunidad. El periodista de River que ni vale la pena acordarse el nombre, debería cortarse el pelo para salir en televisión.
Viendo este rejunte de personas muy cuestionadas en el futbol, es cuando mas se destaca el rol de Fantino. No solo en posición de acusador, se divierte moviendo “a piacere” el microfono de lado a lado de la mesa buscando el pico mas caliente. Se rie cuando los gritos pasan los decibeles y cuando alguno le tira a otro dentro de la mesa. Lejos de ser un programa constructivo, es justo lo que quiere muchas personas. En la era de Tinelli y su bailando, Fantino encontró un lugar en la tele para hablar de los chimentos y la cara detrás de la pelota. Si todavía no lo vieron, pongan America a las 11 cada domingo, y al menos miren un rato. Dudo que resistan mucho, los gritos son insoportables. Pero tal vez te contagies y termines entretenido como ayer lo hice yo. El show del futbol, es todo un show.